by ELENA MARQUÉS

¿Dónde irán los recuerdos que se pierden?
¿Qué interés guardarán en ocultarse
en la esfera del sueño?
¿Qué provecho obtendrán al permitirnos
un hilo diminuto
(la imagen fantaseada de un muro soleado,
la voz de un puerto quieto,
una vereda llena de eucaliptos)
del que apenas tirar; esa madeja
con el cabo perdido en sus entrañas?
¿Dónde queda su peso evanescente
más allá de este día que se agota;
por qué esquivan la piel de nuestros dedos
cual vilanos del aire?
Quizás, si me detengo, regresen transparentes.
Quizás nunca existieron.
(Fuimos carne y memoria,
somos agua y olvido).
Inédito.
No somos dueños de nuestra menoría. Ni recordamos ni olvidamos lo que queremos. Buen día.
Me gustaMe gusta